
Seguridad en el mar: Cómo Bender proporcionó a la tripulación del Global Mercy™ la información necesaria™
Cuando la vida está en juego, no se pueden hacer concesiones en la seguridad eléctrica. Esto es especialmente cierto para la Global Mercy™, el mayor buque hospital civil del mundo. Un símbolo de esperanza, equipado con tecnología de vanguardia, recién entregado y listo para entrar en acción. Sin embargo, apenas entró en servicio, la tripulación se enfrentó a una realidad desalentadora: frecuentes y a veces recurrentes fallos de aislamiento a bordo.
Lo que puede parecer un detalle técnico fue una enorme carga para el equipo de ingenieros y profesionales responsables del sistema eléctrico. En plena puesta en marcha, bajo presión de tiempo y con el objetivo de garantizar la disponibilidad constante del hospital a bordo, tuvieron que lidiar con fallos que un barco nuevo no debería tener. La compleja instalación, los diversos componentes del sistema y las averías difíciles de rastrear llevaron a frustración, inseguridad y la preocupación constante de que los sistemas eléctricos críticos de seguridad pudieran fallar.
Había que actuar. En un barco que debe salvar vidas, la detección temprana y precisa de fallos de aislamiento es crucial. Especialmente en redes IT, las fallas a tierra suelen pasar desapercibidas y pueden ser potencialmente mortales. La tripulación necesitaba una solución que no solo fuera técnicamente convincente, sino que tampoco pusiera en peligro el funcionamiento continuo.
El retrofit como solución
Aquí es donde intervino Bender, con una propuesta poco habitual para un barco nuevo. El equipo de expertos, con años de experiencia en el sector hospitalario y en aplicaciones marítimas, presentó a la tripulación del Global Mercy™ un concepto de remodelación a medida, adaptado exactamente a los requisitos especiales de un buque hospital. Una solución que no solo hacía visibles los fallos, sino que también aliviaba a la tripulación y reforzaba la seguridad a bordo de forma sostenible.
En lugar de una solución estándar, Bender permitió:
El retrofit se realizó por fases y en paralelo con las operaciones en curso. Las áreas críticas, como el sistema de 230V AC, se equiparon con sistemas de localización fijos, mientras que los dispositivos móviles se utilizaron de forma flexible en otras zonas. Así, incluso los fallos temporales bajo carga se detectaron de forma fiable, sin interrumpir en ningún caso el funcionamiento del siste,a.
Hoy, el equipo de ingenieros y profesionales eléctricos a bordo informa de tiempos de reacción mucho más cortos, pudiendo localizar fallos en menos de una hora. Además, la búsqueda de fallos requiere menos personal. En conjunto, esto conduce a una mayor seguridad operativa y más confianza en la infraestructura.
Un caso especialmente desafiante demostró la eficacia del nuevo sistema Bender a bordo: una extensión de cable defectuosa para la limpieza de la cubierta causaba un fallo recurrente. Sin embargo, debido a la humedad y la longitud de los cables, el fallo sólo se producía esporádicamente y bajo ciertas condiciones, especialmente durante la limpieza de la cubierta. La combinación de monitorización permanente, análisis de datos y el sistema de búsqueda de fallos permitió finalmente detectar y solucionar este problema.
El resultado
El retrofit no solo trajo mejoras técnicas, sino también más seguridad, eficiencia y tranquilidad para el equipo eléctrico. Especialmente en áreas propensas a la humedad, como cubiertas exteriores, cocina de a bordo o sistemas de climatización. La eficacia del sistema de búsqueda de fallos se demuestra en la práctica: la posibilidad de analizar los datos de registro a distancia permite una planificación eficaz y un mantenimiento preventivo.
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